Feliz cumple Maestro.
Mesié Discepolín, trompa y grumete
de un barquito de pulpa de pomelo,
por un río mugriento de desvelo,
vos sí que la tenías clarinete;
que el mundo fue y será de la gran siete,
pura trenza y camelo,
sin la punga propina del consuelo,
pa' tirar del piolín del barrilete.
Hermano de la rante cofradía
de yirar por el mundo a la bartola,
la soledad más última y más sola
nos hará compañía...
Y a la hora del piante al infinito,
ni Dios tendrá piedad de tu barquito.
Del libro Oceanario.
Dibujo:Paez / Azzi / Figueroa / Duyos / Calvo.
Fue Dicho
ResponderEliminar“Se podría decir que era un pesimista, pero un escritor que escribe, aunque escriba acerca de la falta absoluta de sentido de todo lo que existe, aunque sienta que Dios es una ausencia y que el amor se ahogó en la sopa, no es pesimista. Si lo fuera, no escribiría.
Dominaba como pocos el arte de la palabra, hablaba y seducía, hablar era un don con el que encandilaba, con el que encantaba, hablaba rápido, se le atropellaban las palabras, las ideas, […] comunicaba el volcán que él era, porque era eso: un flaco volcánico, un torbellino que duró poco, que se quemó pronto, que se creyó fuerte, puso la cabeza y, en un tiempo de odios extremos, se la cortaron.”
José Pablo Feinman
Este poema tuyo debería estar junto a las placas que seguramente adornan el reposo del gran Enrique Santos Discépolo, otro de los notables de los que le comentaba anteriormente, aunque a decir verdad mis conocimientos de su obra son bastantes pobres y se basan en lo más popular , seguramente hay mucho más que desconozco.
ResponderEliminarREM
Este poema tuyo debería estar junto a las placas que seguramente adornan el reposo del gran Enrique Santos Discépolo, otro de los notables de los que le comentaba anteriormente, aunque a decir verdad mis conocimientos de su obra son bastantes pobres y se basan en lo más popular , seguramente hay mucho más que desconozco.
ResponderEliminarREM
Valoro tu comentario. Discepolín fue el gran trágico de la literatura tanguera. Un desencantado de la vida que escribía con tinta de su herida.
ResponderEliminarDecirle que yo por una cuestión generacional soy más bien hombre del rock, de los Beatles, pero también por herencia paterna siempre me ha parecido maravillosa la poética tanguera. De allí mi amor por el tango y sus poetas.