sábado, 24 de diciembre de 2016

Se dice de mí

"No habrá ninguna igual, no habrá ninguna"

Me amamantó el dolor de haber nacido
en la cuna más rante
y con toda la pena por delante
me planté con el cuore decidido.
Latido por latido,
con la sangre febrill y laburante
hice un pacto de vida, Dios mediante,
a fuerza de yugar contra el olvido.
No pudieron conmigo ni el oprobio
del tilingaje burdo
que me trató de grela y de fulana.
Amé, me amaron mucho, tuve un novio
escorado en el zurdo
y pianté del gotán una mañana.

Del libro De lunfa somos.
Dibujo: Lucho Velazquez.

12 comentarios:

  1. tuve un novio escorado en el zurdo...

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  2. Fue registrada como Laura Ana Merello, nacida en la calle Defensa 715, el 11 de octubre de 1904. Hija de Santiago Merello de profesión cochero. Extrañamente no figura en su partida el nombre de su madre. Cuatro años más tarde una muchacha uruguaya llamada Ana Gianelli o Ganelli, se reconoce como su madre en la misma partida de nacimiento. Su padre ya había fallecido con sólo 30 años de edad.

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  3. Bajita, morocha, de bellas piernas, labios gruesos y sensuales, y ese gesto de mirada insinuante y provocadora, de quien todo lo sabe y todo lo ofrece. Esa era ella y su personaje. Y así fue. Buscó todo con rabia, exultante, consiguió muchas cosas pero también perdió.

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  4. Tita no necesitó crear un personaje. En sus más de setenta años de trayectoria artística, simplemente recurrió a expresar, los matices de su propia vida, entregando al público lo peculiar de su personalidad.

    No tuvo maestros. Tuvo abandono temprano, calle y tristeza, donde forjó la prepotencia que la caracterizó toda su vida, fiel reflejo de los papeles que le tocó interpretar en el teatro y en el cine.

    No nació para cantar. De joven decía con humor tangos reos. Más adelante, a medida que su repertorio se fue ampliando, al intentar sostener las notas, desafinaba.

    Pero tenía ángel y era aceptada por su público, tanto es así, que de varios temas realizó creaciones inolvidables y de tal magnitud, que ninguna otra cantante se atrevió a incluirlos en su repertorio sin salir mal parada.

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  5. Llega al escenario al enterarse que se necesitaban coristas en un teatro cercano el puerto, de esos característicos que vemos en las películas, frecuentado por marineros y gente del bajo fondo.

    En este momento viene a mi memoria Marlene Dietrich, aquella alemana bajita, sugerente, de hermosas piernas y desenfadada, los mismos atributos que la Merello, en el film "El ángel azul" donde intentaba cantar en un turbio cafetín y provocando el amor irracional de un serio profesor.

    Un periodista de la época lo describe como un teatrillo de mala muerte, casi pornográfico, de nombre "Ba ta clán", a partir de entonces, a las coristas se las llamó "bataclanas", y este término se convirtió en sinónimo de "mujer alegre".

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  6. Comenzó en el cine con el cine mismo. Aparece en la primera película sonora argentina reconocida como tal, "TANGO", del año 1933.

    Otras posteriores apariciones suyas fueron de "segunda damita joven", pero de personalidad opuesta a la primera actriz que hacía el papel de "cándida" y con quien, en definitiva, se quedaba el galán, todo en un marco de comedia.

    Otras películas importantes de su trayectoria en el cine, que la consagran en forma definitiva, fueron: "Morir en su ley", "Filomena Marturano" (del actor y dramaturgo italiano Eduardo De Filippo), "Los isleros", "Arrabalera", "Pasó en mi barrio", "Guacho", "Para vestir santos", "Amorina" y muchas más hasta superar las cuarenta.

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  7. Como cancionista llegó al disco en el año 1927, para el sello Odeón, con dos temas: Te acordás reo (de Emilio Fresedo) y Volvé mi negra (de José María Rizutti y letra de Fernando Diez Gómez).

    En el año 1929 pasa a la Victor donde graba 20 temas, destacándose Tata ievame p'al centro, Che pepinito y Te has comprado un automóvil.

    Luego de un largo paréntesis vuelve a los estudios de grabación, en el año 1954, de la mano de Francisco Canaro, siendo esta su época consagratoria. Allí surgen discos inolvidables como El choclo, Se dice de mí, Arrabalera, Niño bien, Pipistrella y Llamarada pasional, este último dedicado a Luis Sandrini y del cual es autora.

    En las décadas del sesenta y del setenta graba más de cuarenta temas, con las orquestas de Carlos Figari y Héctor Varela.

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  8. Todo lo hizo con ímpetu arrollador. Fue mujer de muchos hombres, pero siempre reconoció un solo amor, el del actor Luis Sandrini (fallecido en 1980), con el que vivió alrededor de una década y quien luego la abandonara por una actriz más joven, Malvina Pastorino.

    Fuente: Néstor Pinsón / Todo tango.

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  9. Me encanta todo lo que cuentas de los personajes .
    Un beso

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  10. “Me amamantó el dolor de haber nacido
    en la cuna más rante ….”

    La Merello, una mujer extraordinaria de tremenda personalidad, quizás dura para algunos pero que cuando se lo permitía dejaba entrever una enorme ternura. Ella y Gardel a mi modesto entender son los mayores representantes del tango argentino.

    Excelente lo suyo, como siempre.
    REM

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  11. Si, Tita fue una grande, supo inventarse y reinventarse miles de veces, viniendo de una infancia dolorosa y una vida sumamente triste.

    Gracias Rem.

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  12. Ana, pasa que son personajes emblemáticos de nuestra cultura popular a quienes queremos mucho.

    Tita fue irrepetible.

    Sobe.

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